En el día de ayer
Collado Villalba volvió a convertirse en noticia por un asunto relacionado con
una presunta trama de corrupción.
La imagen de la
Guardia Civil entrando en el Ayuntamiento villalbino y la foto del Alcalde
saliendo de su despacho detenido quedarán tristemente en la historia de Collado
Villalba y de los pueblos de la Sierra de Madrid.
No es la primera vez
que Collado Villalba, que en vez de la Capital de la Sierra empieza a ser
conocido como la Capital de la Corrupción, es noticia por algo como esto. En la
pasada legislatura mientras los activistas sufríamos en demasiadas ocasiones el
enfrentamiento con un Ayuntamiento gobernado por el PSOE al mismo tiempo se descubrían
extrañas conexiones entre los constructores de un túnel inútil que había pasado
a costar el doble de lo previsto.
La foto del Alcalde
socialista celebrando la nochevieja en un hotel de Andorra con el constructor
del túnel se convirtió en parte de la vergüenza villalbina y seguramente hizo
que el PSOE perdiera las elecciones locales.
Los compañeros de Izquierda Unida de Collado Unida una vez más se han puesto enfrente de estás practicas y ya están exigiendo una comisión de investigación para esclarecer todo lo ocurrido.
La corrupción es parte
de este régimen, parte del capitalismo. La corrupción no es un caso aislado, no
son cosas sin importancia En los últimos años en la Sierra de Madrid hemos
visto como los Ayuntamientos se convertían en simples sucursales de las
empresas urbanísticas. Empresas que hacían y deshacían planes urbanísticos contrarios
al interés general.
Cambiar esta
situación, es responsabilidad de todos. Que todo el peso de la ley caiga sobre
estos golfos es un paso pero este sistema está gobernado realmente por gente
que nadie vota, cuando existen las puertas giratorias y no existe ningún espacio
de participación ciudadana real.
En la Comunidad de
Madrid el tamayazo supuso un golpe de estado en toda regla y ahora estamos viendo,
y sufriendo, cuáles eran las intenciones de estos golpistas.
Las próximas
elecciones municipales serán importantes, claves para recuperar los pueblos y
la Comunidad de Madrid. Nos jugamos mucho y esperemos que todos estemos a la
altura trabajando en espacios honestos de convergencia.
Esperemos que podamos
cambiar este modelo político caduco y dejar claro que si se pueden construir
Ayuntamientos basados en la participación ciudadana y en el servicio de la
mayoría de la población.
A por ello.
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