¿Estado aconfesional?

 

Según la Constitución Española somos un estado aconfesional pero la realidad es muy distinta. Y no solo por las ayudas económicas que damos a la Iglesia Católica (lo de la Jornada de la Juventud es increíble y ya hablare sobre ello) es que también queda claro que no existe una separación entre la iglesia católica y la administración pública.

En Alpedrete tenemos que ver con vergüenza como en cada inauguración pública aparece el Cura de esta iglesia para bendecir la obra como si viviéramos los años de la dictadura aparte de tener que soportar que la mitad de las actividades de las fiestas del municipio estén relacionadas con misas.

Incluso durante esos días podemos ver a cargos públicos del Ayuntamiento llevando bajo palio al cura. Y esa imagen no debe pasar por alto, es un sometimiento de los representantes del pueblo hacía una iglesia concreta.

Esta mañana se han constituido Cortes Valencianas y la foto del día ha sido esta :

 

Una foto curiosa,¿a que si?. En ella vemos un crucifijo presidiendo esta sesión constitutiva y la cara de circunstancias de la compañera Esther López Barceló. Luego nos hemos enterado que el crucifijo pertenece al diputado Juan Cotino que aparte de pertenecer al Partido Popular también pertenece a la secta del Opus Dei.

Nadie diría que durante dos legislaturas ha gobernado en este estado un país que dice ser de izquierdas, y no solo lo digo por las “progresistas” medidas fiscales y económicas que han aprobado, es que también vemos como la separación entre la iglesia y el estado sigue siendo una utopía e incluso hemos retrocedido durante los últimos años en esta pretensión democrática.

El sábado se constituyen los Ayuntamientos y seguro que nos encontraremos con sorpresas de estas. Incluso en Alpedrete, hace cuatro años me encontré con la constitución y con la biblia al lado, ¿alguien se apuesta conmigo que los nuevos concejales no se van a encontrar con un crucifijo?.

Algún concejal o concejala tendría el sábado solicitar que se pusiera también un plato de espaguetis para rendir homenaje al Monstruo del Espagueti Volador. Por lo menos unas risas se echaría para liberar tanta indignación que suponen estas situaciones.