Ceros a la izquierda ha publicado un video de la intervención de Cayo Lara en el programa "Tengo una pregunta para usted". Cayo me gusto mucho y aunque comenzo estando "una jartá de nervioso" creo que transmitio cercania a los problemas de los ciudadanos.
Aqui os lo dejo :
Desidia y abandono en Soto en Cameros: cuatro días sin alumbrado público.
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Izquierda Unida, denuncia que los vecinos de Soto en Cameros llevan cuatro
días sin alumbrado público, una situación que ha generado preocupación e
indign...
Hace 5 semanas
7 comentarios :
hola compañero, soy Rafa Hortaleza de Ceros a la Izquierda y no mi buen amigo ceronegativo
la lié parda cuando puse el nombre del blog tan parecido al de ceronegativo
:-)
Tantos ceros me han vuelto loco,je,je.
Ya esta cambiado..
Salud!
El lider que teneis parece un tio sensato y trabajador.
POR FIN UN LIDER DE LA IZQUIERDA. PORQUE LLAMAZARES NO LO VEIA YO MUY BIEN Y MAS CUANDO SE RINDIO AL PSOE.
AHORA OS PODRE VOTAR EN LAS GENERALES.
UN SALUDO A FERNANDO
Yo le escuché anoche y da buena imagen, pero me chirrió cuando dijo que estamos en una democracia avanzada y que el PSOE defiende las libertades (como el alcalde de Villalba).
Ninguna mención a la lucha de clases, a la necesidad de destruir el capitalimso... Se confirma que es del ala más moderada del PCE.
Alguna gente de IU y del PCE necesitan y están esperando un mesias que les salve, pero este Cayo no lo será... al tiempo...
Es complicado saber transmitir el discurso de IU en un formato como el de ayer.
Recordemos que en la última Asamblea Federal IU aprobo una linea anticapitalista.
Y el propio Cayo Lara ha defendido en varios actos que la democracia es incompatible con el capitalismo :
http://ecodiario.eleconomista.es/espana/noticias/1053607/02/09/Cayo-lara-la-democracia-es-incompatible-con-el-capitalismo.html
Cayo Lara “El Campesino”, la dignidad de la izquierdaPublicado por J.Parra El Abril - 22 - 2009
Sorprendió gratamente a quienes aún no lo conocían, reafirmó el apoyo de quienes ya teníamos esa suerte, pero sobre todo se erigió ante el gran público como el verdadero líder de la izquierda española. Con un lenguaje directo, honesto y con una increible facilidad para hacerse comprender por la gente y para emocionar, Cayo Lara habló claro contra los poderosos, contra el poder de la Iglesia, a favor de los desfavorecidos, de los parias de la tierra, de los trabajadores y las trabajadoras, de los estudiantes. Alzó la voz contra un sistema injusto y contra una democracia de baja intensidad que hace que el voto de izquierdas valga 10 veces menos que el voto de derechas, nacionalista o socialdemocrata.
Cayo Lara “El Campesino”, orgulloso de sus raices y heredero de sí mismo, de sus luchas, de las nuestras, de las de la clase trabajadora, consiguió lo que hacía años que no conseguía un político de la izquierda. Me refiero a esa izquierda orgullosa de ser izquierda y coherente con sus principios transformadores, a esa izquierda que no compadrea con los banqueros y los poderosos. Y lo que consiguió es que miles de personas se estremecieran en sus sillones, que volvieran a creer en la política, que volvieran a creer en la izquierda, aunque solo fuera porque estaban viendo a un político que no tenía nada que ver con el resto. Estaban viendo el rostro de la izquierda, a un tipo corriente que hablaba de igual a igual al estudiante, al autónomo, al asalariado, a la profesora, al ganadero, y lo hacía con el lenguaje de la gente corriente, sin ambajes, sin juegos de palabras, sin malavarismos dialécticos.
Me gustó, me sentí orgulloso de él, y los teléfonos ardían, el suyo sin duda, pero tambien el mío y el de mis padres, y el de mucha gente de IU y el PCE que lo quiere y le admira, sin cultos a la personalidad, sino como un compañero o un camarada más, con quien compartimos lucha, y que ha tenido la oportunidad de decir lo que tantas veces nos censuran en los medios hostiles, y lo que tanto tiempo hemos esperado escuchar, y como quizá no lo habíamos escuchado nunca. Y lo hizo emocionando, con el silencio cómplice y estupefacto de quienes tenía delante o sonreíamos orgullosos en nuestras casas. Y es que, como decía poco después un lector de laRepublica.es, “la dignidad de la izquierda estaba allí de pie, frente a ellos, firme como una roca y clara como el agua”.
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